miércoles, 24 de diciembre de 2008

Lo peor es cuando lo explican

Unió de Pagesos recibe 45.000 euros de la Diputación de Tarragona. De entrada, ya sin conocer los detalles, lo veo mal. Que una asociación que dice representar al sector económico más subvencionado de Europa reciba ayudas suplementarias de nuestro bolsillo, lo siento, pero me parece una desfachatez. Quizás con ello la Diputación confía evitarse que con motivo de la próxima protesta, nuestros simpáticos payeses le arrojen huevos contra la fechada, o le organicen frente a la puerta cualquier otra perfomance más o menos gamberra. Pero ese es el problema de alimentar durante años a estos señoritos de tractor y Audi.

Lo peor, con todo, me parece la manera de justificar la ayuda. Resulta que es para hacer un estudio sobre "el desarrollo rural en el Camp de Tarragona", que se enmarca dentro de la política de contribuir al "desarrollo equilibrado del territorio" y dar "soporte a los agentes sociales".

Lo de dar soporte está claro. Con 45.000 euros más en su cuenta, no cabe duda de que Unió de Pagesos se va a sentir algo más soportada. Otra cosa es cuánto tiempo tendremos que soportar los ciudadan0s sus periódicos cortes de carreteras a cargo del presupuesto que soportamos entre todos.

En cuanto a lo del equilibrio, confieso que nunca he entendido qué significa. El sector económico principal de Tarragona, al igual que en el resto de Cataluña y de España, es con diferencia el de los servicios, seguido del industrial, y por último del agrícola, pesquero y ganadero, conocido como sector primario. ¿Por qué razón deberíamos favorecer que el porcentaje de este último sector creciera más? ¿En qué beneficiaria ello a la riqueza general? Y si no se trata de esto, ¿a qué se refiere? Les diré mi opinión: El "equilibrio" es la típica vacuidad retórica que no significa apenas nada ni compromete a nada, pero permite rellenar los discursos que adornan el dispendio público.

Hay que reconocer, eso sí, que el estudio sobre el desarrollo rural suena algo más concreto. Es más, yo me atrevería a adelantar una de sus conclusiones: Dirá que el "campo" está abandonado de la mano de Dios (quiero decir, la Administración) y que necesita más "ayudas". Como si lo viera.

miércoles, 17 de diciembre de 2008

Fomento de la lectura

La Generalitat de Cataluña regalará a todo joven que cumpla 18 años, y que lo solicite, una suscripción a un diario o revista a elegir entre 65 publicaciones "validadas" por una comisión. (No sé por qué, pero tengo la sensación de que las publicaciones críticas con el Tripartito no serán "validadas".) La medida de fomento de la lectura cuenta con un presupuesto de partida de 3.000.000 de euros (500 millones de pesetas). De momento, las solicitudes sobrepasan las 13.000, según InfoCatalunya, un boletín mensual de autobombo que distribuye Montilla entre todos los hogares. (Otro despilfarro desvergonzado, por cierto.)

Una clase muy extendida de gente pensará que le parece muy bien fomentar los hábitos lectores entre los jóvenes. Pues a mí no. Yo creo que lo que realmente favorecería la lectura es levantar las restricciones a la libertad de precio de los libros, que so pretexto de proteger a los libreros, impiden su abaratamiento. Pero lo que resulta un insulto a la inteligencia es pretender que después de haberse encargado de la educación de gran parte de esos jóvenes, desde los tres a los dieciocho años, a través del sistema público de enseñanza, el gobierno nos venga con el cuento de que hay que regalarles una suscripción al Avui para que se aficionen a leer. O sea, reconocen que la educación pública es un fracaso apoteósico, y por ello deciden un gasto arbitrario más, consistente en una subvención descarada a medios de comunicación dóciles con el nacional-progresismo.

Si a los 18 años te tienen que regalar una suscripción a un periódico para que te aficiones a leer, significa que tu nivel cultural y tu espíritu crítico es el de un niño de diez años. O sea, lo adecuado para votar al Tripartito.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

¿Qué nos cuesta Boikot Teatre?

Es hora de dejarnos de los grandes planes de rescate financeros, para los cuales la palabra "atraco" se queda ridículamente corta, y volver al espíritu y objeto de este blog, que es denunciar el "pequeño" atraco cotidiano que padecemos -y que a la postre es el que acaba sentando el precedente de los latrocinios a gran escala.

Cada vez que escucho palabras como "campaña", "sensibilización" o "concienciación", me echo la mano a la cartera. Verán por qué.

El Ayuntamiento de Tarragona da inicio esta semana a una campaña para, según dicen, conciliar el ocio nocturno y el descanso vecinal. Es decir, cuidado, no se trata simplemente de que la gente que se levanta a trabajar a las seis o las siete de la mañana pueda descansar (sí, aunque les parezca mentira a algunos, hay gente que se levanta a esas horas, incluso los fines de semana) sino de que haya "convivencia" entre las "partes implicadas". O sea, todos debemos ceder algo. El que quiere descansar para estar en codiciones de mantener a su familia, deberá sacrificar algunas horillas de sueño, ser comprensivo con esos jóvenes que se emborrachan y llenan las aceras de vómitos. A cambio, los noctámbulos deberán reducir sus berridos etílicos a la salida de los locales de ocio, pero en absoluto limitar el horario de sus golferías. Tienen derecho a divertirse, pobrecitos, y al parecer, por alguna razón, lo bueno empieza a las tres de la madrugada.

La cuestión es que para "concienciar" a estos jóvenes marchosos de que sus padres tienen que dormir, si quieren rendir lo suficiente para costearles a ellos sus juergas, el ilustre Ayuntamiento se gastará no sabemos cuánto en carteles, camisetas, chapas y perfomances nocturnos realizados por grupos como Boikot Teatre o Aerodance -o sea titiriteros del mundo, uníos, que hay pastel para todos (a cargo del puto burgués). Así que ahora, los sufridos currantes tienen otro motivo más para el insomnio, y es que sus impuestos se están despilfa..., digo invirtiendo, en "conciliarles" con los de las vomitonas. Qué guay es la regidora de Juventud.

ACTUALIZACIÓN 29-03-10: Dos jóvenes que participaron en las actividades teatrales, Sara Alija y Francesc Valdivia Clavijo, me han remitido sendos correos en los que niegan haber cobrado un duro por su trabajo. Lo celebro, pero sigo pensando que el dinero invertido por el Ayuntamiento en publicitar la campaña es uno de los muchos atracos de la administración que aquí denuncio. De todos modos, hay muchas formas de "cobrar" (posibilidad de encargos futuros, de carguitos en las estructuras locales del dirigismo cultural...) Quizás me equivoque, y estos chicos no acaben chupando de la mamella estatal, de un modo u otro. Me sorprendería agradablemente.